Los campos de Guadix languidecen. Mientras no se cultivan los campos, crecen los cardos, los mancaperros (Astragalus granatensis), las llamadas plantas adventicias…Este abandono del campo, de grandes extensiones, antes cultivadas con cereales, dan la alarma sobre un problema que no se ha planteado con rigor y públicamente en nuestro entorno.
Los males conocidos que padecen en primer lugar los agricultores, que no ven valorado su trabajo, que tienen que someterse a las condiciones que ofrecen intermediarios y grandes centros comerciales. La escasa remuneración, injusta, siempre insuficiente hace que no haya previsión de un relevo generacional en la agricultura. Pocos jóvenes ven atractiva la posibilidad de dedicarse al cultivo de la tierra y al disfrute de una agricultura necesaria y socialmente útil, pero marginada de los centros de poder, y especialmente del poder económico.
Una agricultura y ganadería que desde los inicios del Neolítico, hace más de 5.000 años han sido la base del sustento en estas tierras accitanas hasta nuestros días. Una agricultura que ha ido evolucionando y modernizándose especialmente en las últimas décadas, y que ahora parece que se encuentra al final de un ciclo. Especialmente debería preocuparnos la situación de los agricultores, con pequeñas o medianas extensiones de tierra, dado que las grandes extensiones y explotaciones siempre han tenido más fácil sacar provecho de nuestros recursos y encontrar rentabilidad en el cultivo de almendros, nogales, lechugas, etc.
Frente a este panorama desolador lleno de incertidumbres, conocemos los trabajos documentados, constantes de aisladas experiencias agrícolas, de sacrificados labradores que luchan por sacar adelante sus cosechas y mejorar los suelos que les dejaron sus ancestros.
Destaca por su labor innovadora, respetuosa con la tierra, y buscando el trabajo en equipo, la Asociación ALVELAL (www.alvelal.es). Esta asociación que desarrolla su importante labor en Almería y Murcia, felizmente trabaja también en nuestra comarca. La asociación Alvelal tiene más de 400 socios, vinculados a las zonas rurales. A cambio de una simbólica cuota anual, ofrece asesoramiento profesional, análisis de la tierra, y está permanentemente al lado de los agricultores. A través de los cultivos ecológicos lejos de añadir pesticidas y más contaminantes a nuestros suelos, trata de regenerar la tierra, para mayor provecho y rentabilidad.
La última propuesta pionera de Alvelal ha tenido lugar en la comarca accitana, concretamente en una finca experimental de Ferreira. Ha sido ofrecer un parque de maquinaria a los agricultores, para poder disponer de instrumentos asequibles y modernos que faciliten las duras tareas agrícolas. Gracias a la donación de una colaboradora holandesa sensible a la problemática de la agricultura del Sur, podrán disponer los agricultores-socios de la entidad, de maquinaria para triturar, esparcir estiércol, desbrozar, etc. Toda una apuesta importante de esta asociación que da un respiro y motivos de esperanza a nuestros labradores paisanos.
Si nos preocupa el futuro de la agricultura y proveernos de alimentos para los próximos años, deberíamos pensar también por qué no se ofrecen ciclos formativos de agricultura y ganadería en nuestros institutos, o por qué no se demandan.
Para terminar, recordar que los mejores alimentos que podemos consumir son los de cercanía y de temporada, sin pesticidas ni contaminantes para nuestro suelo. Si debemos comer tres veces cada día, será bueno atender con la importancia que merece este sector y preparar un mejor futuro.
JM Molas